El cartón es la materia prima con la cual se fabrican la mayor parte de nuestros expositores y también nuestras cajas para productos. Pero, ¿cómo se hace? ¿Qué importancia tiene? Y, ¿por qué se ha convertido en nuestro material estrella?
Te lo contamos en este artículo del blog. Pero, primero…
… Beneficios del cartón como materia prima
Hemos hablado en muchas ocasiones de lo importante que es este material desde diferentes puntos de vista, pero nunca está demás recordarlo. Principalmente su beneficios recaen en el aspecto:
- Logístico: su poco peso hace que no encarezca innecesariamente los transportes. Antes de ser convertido en cajas se transporta en planchas que prácticamente no ocupan espacio, lo que facilita sus viajes pudiendo llevar una gran cantidad de cartón en poco espacio.
- Económico: es muy barato y por eso es una materia prima tan interesante. Aunque cuanto mejor es el cartón mayor es su precio, siempre resultan bastante más económico que otros materiales como los plásticos o los metales que también se utilizan en la fabricación de los expositores.
- Versátil: puede tomar cualquier forma y se pueden realizar expositores de todos los tamaños. Gracias a la diferente calidad, grosor y gramaje algunos expositores aguantan pesos muy altos sin deformarse, por lo que pueden contener una gran diversidad de productos y grandes cantidades de los mismos, sirviendo también como zona de almacenamiento en la tienda.
- Ecológico: se puede reciclar y proviene, al menos parcialmente, de materiales reciclados, tanto papel como restos de maderas que se han utilizado para otras cosas y que ahora se retiran del uso que originariamente tenían.
Cómo es y se fabrica el cartón corrugado que utilizamos en Promoción PLV
El cartón corrugado es el que se utiliza de manera más habitual para hacer cajas y expositores. Esto es así porque se trata del cartón más resistente. Está compuesto como mínimo por tres capas: dos capas de cartón liso y en el medio una hoja de papel ondulado que es la que le aporta su firmeza.
El papel ondulado se fabrica con hojas de papel de gran tamaño que se pasa a través de una máquina con estrías y crea en la hoja las dobleces que le dan nombre y que se llama onduladora. Tras este proceso, el papel ondulado se coloca entre dos láminas de papel kraft, el cual es encolado para que se una de manera permanente.
Las planchas de gran tamaño son cortadas a su vez en otras planchas que ya tienen la forma precisa para dar lugar a la caja o al expositor que se va a realizar con ellas. En algunos casos, incluso se crean las dobleces antes de someter el cartón al proceso de impresión.
Estas planchas de papel corrugado pueden ser a su vez reforzadas con diferentes tratamientos y sometidas a procesos de impresión para darles color y fijar sobre el cartón los dibujos o la información que se quiera colocar en ella. Tras esto, solo queda realizar el proceso de montaje y se tendrá el producto final.
Normalmente, las cajas viajan a su destino sin montar para que ocupen mucho menos espacio y son montadas en el momento en que se procede a su rellenado en fábrica o se les va a dar el uso final, por ejemplo como expositores en tiendas o en grandes almacenes.
Esto es todo lo que tienes que saber sobre la fabricación del cartón
El cartón no es otra cosa que papel más grueso y fuerte y con un aspecto más basto. Para su fabricación se utilizan fibras vírgenes y pasta de papel reciclado. Las láminas de papel resultantes se unen de manera invisible para el ojo hasta formar las láminas de cartón.
Los cartones pueden tener diferentes gramajes, que hace referencia al peso que el cartón tiene por metro cuadrado, lo que nos hace entender la cantidad de papel que hay. Cuanto más gramaje tenga un cartón más resistente será.
No hay que confundir el gramaje con cantidad de cartón, ya que este puede ser muy grueso, pero ser de mala calidad y tener poco peso debido a que hay mucho aire en su interior. Mientras que otro de apariencia más fina puede tener un mayor gramaje y, por tanto, más resistencia y soportar mejor el peso.
También existen cartones de diferentes calidades en función de la pasta de papel de la que proceden y del tratamiento posterior. Por ejemplo, el cartón blanqueado con estuco es el que se utiliza en los envases más lujosos que tienen un acabado suave como plastificado.
Los cartones para los expositores de un solo uso suelen ser toscos y de baja calidad porque no es necesario nada más y así se abarata mucho la fabricación.
La mayoría del cartón procede de papel reciclado y de madera de pino, que es la más barata y también la de eucalipto, muy abundante en algunas zonas de España debido a que crece con mucha rapidez una vez que se corta y se replanta.